EL BATALLÓN PERDIDO/ EL BOSQUE

"¡Aquello no eran arboles Señor! Se lo juro por Dios... ¡Aquello eran como patas de un animal! Sí, parecían como una veintena de arañas gigantes cuyo cuerpo se encontraba enterrado en el suelo! ¡Y todas se movían!"
Testimonio del soldado Terry C. Ewans uno de los pocos superviventes de la compañía G del 308º Batallón del Regimiento de Infantería que se adentraron en al bosque de Argonne, Verdún en 1918.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

EL BATALLÓN PERDIDO/THRÜND

"Y ahora, mis deliciosos soldaditos, os ire comiendo crudos uno por uno..."
El Ogro Thründ al 307º Regimiento de Infantería compañía K. en un lugar perdido dentro del Bosque de Argonne, Verdún Francia, 1918.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

INOPORTUNO

¡TOC! ¡TOC!
-¿Quién es?
- El pájaro carpintero.
- ¡Pues lárgarte a otro lado y deja de joderme la puerta!

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

CUESTIÓN DE LOGÍSTICA

Ni corto ni perezoso llegaron a tiempo...
El primero porque para llegar estaba todo muy alto y no había escaleras a mano para poder alcanzarlo. El segundo era bien obvio.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

DE GRATIS

- ¿Oiga aqui que se reparte que hay tanta gente?
- Galletas.
- ¡Ah, pues quiero una!
Y le soltó un sopapo que le duró diez meses.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

EL HOMBRE OBLICUO

-¿Oiga, usted siempre es así?
- ¿Así de qué?
-Así de complicado
- Ah, no es que soy contorsionista de profesión y estaba ensayando...

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

CUMPLEAÑOS

Desprendió el papel con sumo cuidado. Le fascinaba su tono rojo cobrizo, metálico. Contempló la caja de madera antigua en cuyo interior se escondía su regalo. La acarició, era una caja hermosa aunque un tanto tosca. Todos les animaron a que la abriera. Él no les hizo esperar. Tenía muchas ganas de saber lo que allí dentro se escondía. Sobre la tapadera había una llave pegada con celo, la tomó y la introdujo en la cerradura; le dio una vuelta y el pestilló cedió. Se hizo un silencio. Abrió lentamente la tapa hasta dejarla el vertical. Miró en su interior y ahi estaba. Lo que más deseaba, aquello que había soñado tantos y tantos años. Con lagrimas en los ojos lo tomó en sus manos y lo abrazó. Todos los allí presentes sonrieron a la vez.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

AIRE

Suspiró, por última vez, y en ese último soplo de vida se escaparon todas sus vivencias, sus miedos, sus alegrías, sus sueños... Era un momento muy intimo y personal para ella, pese a estar en esos instantes acompañada de sus seres amados. Una vez acabado, el vacío ocupó su cuerpo, dejándola como un burdo esbozo de lo que había llegado a ser antes.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

ARTE

Agarró el lienzo, lo colocó sobre el caballete, de forma horizontal. Tomó el pincel y comenzó a pintarlo, todo de blanco, porque le apetecía.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

CURIOSIDAD

- Perdone que me acerque pero es que siento mucha curiosidad por lo que está haciendo...
- No se preocupe, lo comprendo, descuartizar ancianitos tras robarles la pensión no es nada habitual en el día a día.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

LA MIRADA

- ¡Podría usted dejar de mirarme a los ojos!
- Lo siento, es que al tener dos lo encuentro tan fascinantemente extraño...

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

LA AYUDA

"Te lo juro Claude ¡Había como una veintena de ángeles luchado con nosotros en las trincheras!"
Fragmento de una carta enviada por Pierre Golonge a su primo Claude Golonge desde el campo de Batalla del Verdún el 23 de septiembre de 1916.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

SOLARIUM

Don caramelo salió a la calle. Tanto calor hacía que comenzó a derretirse y sobre todo a atraer los insectos. Huyendo se metió en un callejón, lejos de la luz del sol, rodeado de un frescor agradable que le hizo recuperar la calma. De repente se dio cuenta de que no estaba solo. Tras de él, abrazados, llenos de pavor se hallaban Doña Cornetto de nata y Don Pirulo de naranja bajo un profuso charco de su propio jugo.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

MEMORIA

Salomón escribía sus memorias a lápiz sobre un papel. Él le ponía mucho empeño, le costaba acordarse de muchos detalles, pero deseaba tanto dejar un poco de sí mismo entre los suyos que lo hacía pletórico de felicidad; lo malo es que no se daba cuenta de que al ser zurdo su mano al rozar con la superficie de la hoja iba difuminando las palabras, incluso borrándolas.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

CONFIANZA

"Querida Julietta:
Las cosas entre tu hijo y yo parecen ir en viento en popa. Hoy me ha confundido con un gato.
Tu amado
Philippe"

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)

MONOPOLIO

Como cada viernes el Emperador se acercó al balcón para saludar a su pueblo. Caminaba con honores, vestido de gala, deseando que lo aclamasen. Sus lacayos apartaron las cortinas y le abrierón la puerta. De repente donde antes había una plaza ahora apareció otro edificio, feo, de ladrillo vista, muy pegado al suyo. Pudo observar en una de las ventanas a una ama de casa cocinando una tortilla para su hijo. Éste le miraba atónito sentado en su trona.

© Richard Archer - 2010 (Todos los derechos reservados)